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¿Qué son los comfort dogs? Llega la ayuda a los rescatistas en desastres

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Con chalecos con la inscripción “por favor acaríciame”, nueve golden retriever entrenados como perros de consuelo por la Iglesias Luterana, se desplazaron junto a sus guías desde diferentes puntos del país a Surfside, Florida, donde el derrumbamiento de un edificio el 24 de junio provocó casi un centenar de muertos.

Por Carlos XESTAL

  

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Esta pequeña localidad de menos de 6.000 habitantes del estado de Florida sufrió la peor catástrofe de su historia cuando un edificio residencial de 12 plantas se derrumbó la madrugada del 24 de junio, dejando casi un centenar de muertos entre más de seis millones de kilos de escombros en el lugar donde se erigía, desde 1981, el edificio Champlain Towers South.
Los servicios de rescate, provenientes de diferentes rincones del país, trabajaron a contra reloj para encontrar a posibles supervivientes. Noche y día estos equipos sacaron tanto a víctimas como a heridos que de forma milagrosa consiguieron sobrevivir a una tragedia con esta cifra de fallecidos “Este es un asombroso y desgarrador número que nos afecta a todos muy, muy profundamente”, indicó en una rueda de prensa la alcaldesa del condado Miami-Dade, Daniella Levine Cava.
Tras conocerse el trágico suceso, se desplegaron equipos de rescatistas para ayudar con la recuperación en el lugar del colapso. Equipos USAR, tanto de Estados Unidos como de países de todo el mundo, no dudaron en embarcarse en la difícil tarea de búsqueda de personas entre los restos del edificio. Pero, ¿quién los ayuda a ellos?
Uno de los últimos equipos en llegar llevó un tipo de asistencia muy diferente, dirigida expresamente a estos rescatistas, entre los que también hubo hospitalizados por daños como incidentes cardíacos, laceración o heridas graves por accidentes con los vehículos de rescate. Son los comfort dogs, LCC K-9, un grupo de perros de la Iglesia Luterana de atención humana entrenados para interactuar con personas que sufren por situaciones críticas.
Así, los golden retrievers ayudaron a brindar un respiro muy necesario a los socorristas que trabajan incansablemente para encontrar víctimas y a los miembros de la familia que han perdido a sus seres queridos. “Estamos muy preocupados por su salud mental tanto de rescatistas como de familiares de víctimas o de habitantes del edificio que han perdido todo”, dijo Bonnie Fear, coordinadora de respuesta a crisis de LCC K-9. Los cachorros llevaban chalecos azules que decían “Por favor, acaríciame”. Fear dijo que la gente en el monumento notó de inmediato a los perros y los acarició, algunos con lágrimas en los ojos y otros con grandes sonrisas.
Cuando los dolientes ven a los perros, “decimos que están aquí para que los acaricies. No preguntamos si quieren acariciar a los perros”, explicó, “porque algunas personas ni siquiera pueden procesar una pregunta. Están en crisis“. “Tratamos de hablar muy poco porque queremos que ellos se encarguen de sus sentimientos, sus emociones con estos perros”, agregó Fear. “Algunos aguantan, no quieren llorar, están luchando contra eso, y estos perros ayudan con eso”.
Bartels, el pastor local, dijo que los afectados a menudo “simplemente se agachan y acarician a los perros y eso les da paz”.

Estos perros, con más de 2.000 horas de formación, son animales de trabajo entrenados en la atención humana que abarca la naturaleza y las habilidades únicas y relajantes de los golden retrievers de pura raza.
Fundado el grupo en 2008 por la Lutheran Church Charities, con más de 130 perros de confort, LCC K-9 sirven en 27 estados en hospitales, escuelas, hogares de ancianos, centros de cuidados paliativos, centros de rehabilitación y centros de cáncer.
Antes que en el edificio de Florida estuvieron en Nueva York y Nueva Jersey después del huracán Sandy en 2012 y en Texas después del tiroteo en un Walmart de El Paso en 2019.  Los perros LCC K-9 Comfort Dogs, que viven en las casas de los cuidadores asignados, sirven todos los días en la comunidad en la que se encuentran y se envían en tiempos de desastre y crisis para brindar consuelo a todos los afectados, incluidos los socorristas y los voluntarios que los atienden.
En Surfside, por ejemplo, Hope, una perra de Georgia, inmediatamente gravitó hacia una adolescente llamada Sarah que estaba en el centro de asistencia familiar con sus padres después de que su condominio cerca del lugar del colapso fuera evacuado. Sarah abrazó a Hope y luego tomó un video del perro con su teléfono. “Son realmente dulces y agradables cuando alguien se les acerca”, dijo Fear.
Otro caso compartido por la Iglesia Luterana en su twitter es uno de los bomberos en el colapso de Surfside acariciando a Tobias, un perro reconfortante de la Iglesia Luterana Benéfica de Illinois. O el de otro bombero, en este caso de Florida, abrazando a Hope, el perro de confort LCC de Georgia.
O uno de los perros de consuelo saludando a un estudiante en la escuela Holy Cross Lutheran School en el norte de Miami en el lugar luego de la devastación de la comunidad en Surfside.
Los datos
94 muertos y más de 200 heridos en una población de 5.600 habitantes

(Páginas 34 y 35).

 

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