Prestigioso reconocimiento al trabajo periodístico que desveló la brutalidad de perros policías en EE UU
La investigación de la asociación de periodistas de IndyStar, de la que se hizo eco LADRIDOS, que destapó que los perros de las unidades caninas americanas hieren de gravedad, o incluso matan, con total impunidad a detenidos por la Policía, la mayoría negros, jóvenes, desarmados o acusados de delitos leves ha recibido el prestigioso premio nacional de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca.
Por Emer IGLESIAS
Los miembros del jurado calificaron a los reportajes de “penetrantes” en la serie encabezada por la historia de un hombre de Alabama asesinado por un oficial K-9 y dijeron que la investigación “no podría ser más oportuna o relevante” en un momento de debate nacional sobre el comportamiento policial.
“Nos sentimos honrados de que nuestro trabajo sea reconocido y estamos agradecidos con nuestros colaboradores por informar de esta historia en todo el país”, dijo Kelly Ann Scott, vicepresidenta de contenido de Alabama Media Group. “Esperamos que este trabajo arroje luz sobre un problema para que las comunidades puedan trabajar hacia el cambio”.
Como indicó LADRIDOS en la revista de diciembre, la investigación, que se realizó durante un año, destapó unas cifras aterradoras: en Indianápolis, por ejemplo, que lidera el ranking de mordeduras de K9 de las grandes ciudades estadounidense, cada cinco días un perro ataca de forma peligrosa a algún sospechoso, la mayoría de ellos negros, jóvenes, desarmados y acusados de delitos menores sin atisbo de agresividad.
Según descubrieron los reporteros, entre 2017 y 2019 las ciudades donde más perros K9 fueron agresivos son Indianápolis, donde hay registradas 243 mordeduras, Los Ángeles con más de 200 ataques, Phoenix con 169 registros o el Departamento del Sheriff en Jacksonville, Florida, con 160 agresiones caninas en este período.
Otro hecho que destapan, tras explorar el mundo oculto de las unidades policiales K-9, es que muchas personas mordidas estaban desarmadas, acusadas de delitos no violentos o incluso ni eran sospechosas de nada y la agresión canina se produjo por cosas tan ridículas como un problema con una matrícula, una llamada de atención por orinar en público o un hombre que buscaba un gato perdido.
Lo periodistas han descubierto esta atrocidad tras examinar miles de páginas de documentos de los registros públicos de los departamentos de Policía de las 20 ciudades más grandes del país y cotejarlos con expedientes judiciales de los procesos abiertos.
Las mordeduras de un perro policía pueden parecerse más a los ataques de tiburón que a los mordiscos de una mascota familiar. Esto, unido a la falta de formación de la mayoría de los guías caninos, multiplica exponencialmente las agresiones, ya que algunos perros no dejan de morder y deben ser retirados por un policía, lo que empeora las lesiones. “Encontramos docenas de casos en los que los adiestradores tuvieron que tirar de los perros, golpearlos en la cabeza, estrangularlos o usar collares de choque”.
La “buena” imagen que tienen los perros policía entre la población y el hecho de que muchos jurados sientan empatía y amen a estos animales hace que casi nunca haya una compensación hacia el agredido y mucho menos una condena del policía que ha lanzado al animal contra el sospechoso. Es lo que los abogados llaman “efecto Lassie”, que hace abandonar a las víctimas la idea de presentar denuncia.
Las agencias de aplicación de la ley americana emplean a unos 15.000 perros para todo, desde encontrar niños perdidos hasta olfatear drogas, según la Asociación Canina de la Policía de EE UU. Pero ninguna base de datos de todo el país rastrea a los perros K9, ni la cantidad de mordeduras o quién es mordido. Además, no existen requisitos nacionales para los adiestradores de perros.
El Foro de Investigación Ejecutiva de la Policía, un destacado grupo de expertos en aplicación de la ley, pidió recientemente estándares nacionales más claros para garantizar que todas las agencias tengan protocolos para el uso de perros preparados como caninos policía.
En su guía publicada en mayo sobre “Orientación sobre políticas y prácticas para caninos de patrulla”, el Foro parte de la base de que las unidades caninas son herramientas valiosas para la Policía y pueden ayudar en situaciones como buscar y localizar sospechosos y pruebas o realizar búsquedas en lugares donde sería peligroso enviar un oficial o un diputado. Pero alertan de que la intervención de un K9 significa introducir una vida.
Los datos
5 días es el plazo de tiempo en el que un perro K-9 manda a un sospechoso a un hospital
243 mordeduras registradas en Indianápolis en el periodo investigado
Cada cinco días un perro K9 manda al hospital a un sospechoso
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