Una Universidad de Burgos pone en marcha un trabajo con perros para buscar restos óseos
Esta pequeñaja de san Huberto está iniciando su formación como perro de rastreo para detectar restos óseos tanto recientes como con años de antigüedad de cara a ayudar a los investigadores de la universidad burgalesa bajo la dirección del antropólogo Ricardo Ortega-Ruiz. La unidad de rescate Ucas de Arrate ha adquirido una cachorrita de bloodhound para un proyecto con la Universidad Isabel I de Burgos.
Por E. IGLESIAS
El trabajo entre la Universidad Isabel I de Burgos y la unidad canina de rescate Ucas de Arrate tiene un objetivo muy claro: entrenar perros en la búsqueda de restos óseos en antropología forense.
Para ello, los responsables de esta Unidad, con sede en Cubo de Bureba, Burgos, no ha dudado en desplazarse hasta Cataluña en busca de un ejemplar de la raza bloodhound, una cachorra de solo cuatro meses a la que han bautizado como Lenteja.
La idea de la investigación es “buscar personas desaparecidas a través de la detección de restos óseos, o levantar fosas con cadáveres enterrados, por ejemplo, y ahí es donde Lenteja nos tendrá que decir dónde hay restos”, señala Judith Rasines, educadora y formadora canina de Ucas de Arrate a LADRIDOS.
Esto surge como colaboración con el laboratorio de Arqueología y Antropología Forense del Instituto de Formación Profesional en Ciencias Forenses de la Universidad burgalesa dirigido por Ricardo Ortega-Ruiz.
Según se señala en el proyecto “Esta investigación se realiza con el fin de ayudar en la búsqueda de restos óseos humanos para su posterior estudio; así como para localizar estos restos en casos de desapariciones con años de antigüedad”.
El objetivo de la Universidad, añade Rasines, es “estudiar por qué han muerto, descifrar las causas del fallecimiento, nosotros ponemos a los perros para que detecten dónde hay restos”.
“El objetivo de este proyecto consiste en colonizar el cerebro del perro con el olor de los huesos humanos, trataremos de hacer que el animal memorice ese olor para que sea capaz de localizarlos en cualquier medio, ya sea natural o urbano”, explica el presidente de la Asociación Ucas de Arrate, Valeriano de la Calle.
El antropólogo Ricardo Ortega, especializado en Identificación Humana tanto dentro del contexto histórico-patrimonial desde la prehistoria hasta el mundo actual como en casos criminales, es el encargado de desarrollar la investigación científica desde la antropología forense, siendo los perros una valiosa herramienta para detectar los posibles lugares donde puede haber restos humanos enterrados.
Los pioneros en este tipo de investigación es un trabajo iniciado en el País Vasco hace más de diez años, donde se preparaba el primer perro de detección de restos humanos óseos para la localización de fosas comunes de la Guerra Civil. Este can fue formado y respaldado por la Organización sin animo de lucro Aranzadi Zient zia Elkartea. La Unidad Canina, dirigida por Ángel Rodríguez Larrarte se encarga de realizar labores de ubicación de fosas con cuerpos o evidencias que lleven a su localización y durante varios años destaparon varias de estas fosas.
Para la formación de Lenteja se prevé un espacio entre ocho meses y un año, “tenemos que ver cómo va evolucionando, nosotros la estamos iniciando con mucha ilusión y trabajo”, añade Judith.
Un Ssangyong Rexton parado
Ucas de Arrate recibió en cesión el 4 de febrero un vehículo Ssangyong Rexton por parte de la Agencia de Protección Civil de Castilla y León porque son una asociación colaboradora del 112.
Es un vehículo del que tienen que pagar el seguro, mantenerlo, y tenerlo al día para el momento en que sean activados para una emergencia.
Pero se da la circunstancia de que Ucas de Arrate no ha sido activada ni una sola vez este año, por lo que no pueden usar el Ssangyong Rexton. “Lo tenemos cedido por 20 años, pero es incomprensible. Si te llama una familia que tiene un desparecido y quieres ir, no puedes porque no hay permiso, es un vehículo de alta gama parado en la puerta de nuestra casa, solo nos supone gastos”.
La polémica está en las redes sociales, donde Ucas de Arrate denunció la incongruencia de recibir un vehículo para usar cuando haya que hacer una búsqueda y que luego no se puede usar. La sorpresa no solo vino con esta infraestructura que ha sido pagada con dinero público y está inutilizada, también de las redes sociales. Muchos familiares de desaparecidos que están pidiendo un día sí y otro también a Ucas de Arrate que hagan búsquedas, no salieron de su asombro cuando en una publicación de la unidad canina en Facebook contestó la mismísima directora de la Agencia de Protección Civil, Irene Cortés Calvo, señalando que “si formáis parte del sistema de protección civil de la Junta de CyL y por ello habéis recibido, material y un vehículo, debéis ser activados a través del 112. Como sabéis todo se os cede con la única condición de respetar las reglas del juego como el resto de agrupaciones y asociaciones. Debéis respetar la uniformidad, el uso y los protocolos establecidos por la Agencia de Protección civil, organismo que dirijo”.
Otras asociaciones de búsqueda y familiares de personas desaparecidas no dudaron en mostrar su indignación. Cientos de mensajes arremetieron contra la directora por su falta de profesional por no activar a esta unidad canina de búsqueda y contestar por redes.
Los datos
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(Páginas 38 y 39)
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