Así es el bóxer: seguro, sociable y juguetón
Raza de trabajo ahora mayoritariamente animal de compañía, juguetón, alegre y sociable con todos, desde el Bóxer Club de España luchan por recuperar el carácter propio de esta raza al igual que huyen de esas transformaciones que alejan la cabeza, emblema de la raza, de su estándar, acercándolo más a los braquicéfalos, con los consiguientes problemas de salud. El sello de identidad de esta raza es su sociabilidad, la seguridad de sí mismos y su deseo de jugar aunque pasen los años.
Por Miguel PELE
El Bóxer Club España tiene un objetivo primordial que es difundir la raza, darla a conocer al público en general a través de ejemplares que salgan de una selección de cría. Esta raza está muy extendida y los criadores repartidos por toda España. El club, que fue fundado en 1980, cuenta con unos 350 socios por lo que las monográficas suelen tener una participación muy numerosa.
Para ello, en las seis o siete monográficas anuales que realizan por nuestra geografía buscan el ejemplar estándar que se ajuste a los tres parámetros que quieren que tenga: carácter, salud y belleza. Además, también realizan campeonatos de trabajo.
En cuanto al carácter, llevan a cabo quedadas, charlas, cursos… para promover un poco este aspecto, porque últimamente “estamos viendo perros un poco inseguros, miedosos, un poco más tímidos… y el bóxer es todo lo contrario, es un perro alegre, muy seguro de sí mismo, sin problemas de sociabilidad. De él siempre se ha dicho que es el eterno cachorro, muy juguetón, que se lleva bien con los niños”, nos cuenta Álvaro Ríos, secretario del Bóxer Club de España (BCE).
Además de estas pruebas, se realiza un test de sociabilidad, obligatorio para optar al campeonato del club, porque lo consideran tal vez “lo más importante de este perro, porque es el sello de nuestra raza”.
El temperamento, como perro de presa, es muy fuerte y por eso es muy fácil adiestrar en defensa por ese instinto tan marcado y al ser juguetón esto ayuda a que se pueda adiestrar en otros aspectos. Y hará todo lo que se le pida por conseguir su juguete, su premio, su pelota. A diferencia de otras razas, prefiere adiestramiento por juego antes que por comida.
La salud
En la página web del BCE, entre otros muchos apartados, hay uno específico sobre los problemas de salud que hay que controlar en los ejemplares desde jóvenes: las cardiopatías, la espondilosis y la displasia.
Dentro del club, para los títulos internos de la raza, la displasia está permitida hasta grado B. En espondilosis, que consiste en la unión de vértebras como si estuviesen soldadas, aspecto que reduce la movilidad del perro, se permite hasta el grado 2; y en corazón también hasta grado 2. Con displasia o espondilosis un perro puede vivir, pues hay medicación y la veterinaria ha avanzado mucho, pero si tiene mal el corazón acabará muriendo con el paso de los años.
Estas pruebas se realizan a partir del año de vida y desde el club se recomienda para la cría a los perros sanos, generalmente los que quedan campeones en las monográficas y así se van buscando los mejores ejemplares sanos para cruzar.
La belleza
Uno de los principales errores fue “llamar a estas pruebas como pruebas de belleza, cuando el perro es de utilidad y con el tiempo se pierde esa utilidad para la que fueron creados”. En sus orígenes el bóxer era un perro de presa, para sujetar a los animales hasta que llegase el cazador, para los ganaderos, para manejar el ganado, para lo que hiciese falta en una granja. Hoy en día, “se utiliza sobre todo como animal de compañía, como perro de guarda yo no lo veo por su carácter amigable. Y sí dentro de las otras posibilidades deportivas como agility, IGP, obediencia”.
En cuanto a la belleza, los bóxer españoles están entre los mejores de Europa, si bien está bajando el nivel en todo el continente porque cuesta mucho encontrar los mejores ejemplares para la reproducción. Lo más llamativo en el perro es su cabeza, se intenta recuperar el cráneo un poco más estrecho, la expresión viva con los ojos negros y frontales.
Cuando la cabeza se ensancha los ojos suelen irse más al lateral, “dando un aspecto más achinado y ojos oblicuos”. Consideran muy importante que el bóxer se aleje del buldog en su cabeza chata, que tiene problemas fisiológicos asociados. Estos afectan a los braquicéfalos, con graves dificultades de respiración y se hacen más ostensibles en las épocas calurosas o con el ejercicio físico. “Las proporciones del cráneo en el estándar son de 2-1, es decir, dos de cabeza y uno de hocico, pero no menos, para que no ocurra ese problema en nuestra raza”, aclara Ríos.
Por sus dimensiones está catalogado como un perro grande, pues los machos superan de largo los 30 kg y las hembras están muy cerca de esta cifra. Con una altura a la cruz alrededor de los 60 cm, siempre algo menos en las hembras, presentan un porte atlético con llamativa musculatura en ambos miembros.
Hay variedad de colores, predominando el dorado con o sin manchas blancas, el atigrado y el atigrado oscuro. Como todo perro grande su esperanza de vida está entre los 10-12 años, pero con los cuidados veterinarios que ahora tienen, una buena alimentación y ejercicio diario pueden superar de largo esa edad.
Los datos
350 socios tiene el BCE
1980 año de creación del club
10-12 años de esperanza de vida
+ 60 cm de altura de la cruz
(Páginas 12 y 13)
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