Las Cortes de Aragón dan un paso más a favor del Can de Chira
La comisión de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de las Cortes de Aragón aprobó la tramitación de esta proposición no de ley para reconocer oficialmente esta raza originaria de Aragón, que sube otro peldaño para lograr ser raza a nivel nacional. De estar casi extinta a contar con el respaldo institucional han pasado casi 20 años. Lo importante es la conservación de este perro y la mejora de su prototipo racial
Por Miguel PELE
Sí, unanimidad es la palabra más repetida en la sesión de la comisión de para aprobar la Proposición no de ley número trece en la que se acordaba el reconocimiento oficial de las Cortes de Aragón de su segunda raza canina, el can de chira, que ahora hará pareja con el mastín del Pirineo. A dicha sesión acudieron los directivos de la Asociación Can de chira, con Rafael Alfranca al frente como presidente de la misma, que llevan años luchando para llegar a este momento y que ahora ven el camino despejado, tras el apoyo institucional, para continuar con la recuperación de la raza.
Los diputados representantes de todos los partidos políticos acordaron previamente ser breves en la tramitación y en sus respectivas intervenciones, puesto que en el ánimo de todos se veía como necesario proteger esta raza que tanto dio en tiempos pasados a la ganadería aragonesa, especialmente a los pastores trashumantes.
Tras las breves exposiciones de cada uno de los diputados se procedió a una única pregunta a la que todos respondieron afirmativamente levantando la mano. Así quedó aprobada la Proposición no de ley, que ahora deberá pasar al Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, tras la solicitud y envío de documentación, y de ahí pasar a la Comisión Nacional de Zootecnia, adscrita al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
El can de chira, orgullo del Alto Aragón, ha pasado en lo que va de siglo de ser un perro prácticamente extinguido a una recuperación lenta. Todo ello se le debe al esfuerzo de unos pocos, personas que entendieron que las razas autóctonas no deben desaparecer, a pesar del abandono del campo y la conversión de la ganadería extensiva en establos cerrados.
Tras años de recuperación, sin apoyos más que algunos testimoniales de organismos privados, sus esfuerzos le llevaron a a ser reconocida como grupo étnico, gracias a la labor y la continuidad de la Asociación del can de chira, y ahora a estar respaldada por el propio gobierno de Aragón. Los pasos se van dando y ese día en el que esta raza sea reconocida por el Estado cada vez está más cercano.
La votación en la Comisión de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente debería servir de modelo por aprobar esta proposición no de ley, modelo a seguir para lograr que todas las razas caninas españolas tengan respaldo institucional, como ya ocurrió con las razas gallegas, canarias o vascas y como lleva demandando el naveño en Extremadura.
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