Raza pequeña, rústica y con gran temperamento
El más pequeño de los perros originarios de la isla de La Palma, no por ello menos importante, surgió a mediados del siglo XX de cruces de terrier con una raza que se conocía como “chulito”. Su misión fue y es mantener a raya a los roedores en las plantaciones, los campos y los almacenes de productos agrícolas. Activo y con gran temperamento, cazador de ratas, ayudante de caza o de alerta ante intrusos
Por Miguel PELE
Esta raza es relativamente reciente y fue entre los años 60-70 del pasado siglo cuando más cantidad había, mitad de perros que traían los ingleses (terrier) y otra mitad de unos ejemplares que había en las islas, a los que llamaban “chulitos”. Pero con la llegada de razas foráneas comenzaron a descender. Ambos se destinaban al control de ratas y otros pequeños roedores, tanto en las plantaciones de tomate, que posteriormente fueron de plátanos, como en las instalaciones portuarias donde se acumulaban estos productos para exportar. Como en esa época solían estar sueltos era inevitable que se cruzasen. De esta forma surgió, con el tiempo, el ratonero palmero.
Así nos lo cuenta Andrés Rodríguez, presidente de la Asociación para la Recuperación (y reconocimiento) del Perro Palmero, ARPE. Aunque conocía los ratoneros desde pequeño, fue a comienzos de siglo cuando junto a otro amigo comenzaron a criar en la isla de La Palma con seis o siete ejemplares de buenas características. Posteriormente, en 2009 se constituyó oficialmente la asociación.
La asociación siguió trabajando para la recuperación de este ratonero palmero y cuando cumplieron los requisitos exigidos, la RSCE los consideró como grupo étnico en 2023.
En la actualidad, tienen controlados más de 400 ejemplares en la isla de La Palma, en torno a 300 en Tenerife y otros repartidos por todas las Islas Canarias, junto con algunos ejemplares en Estados Unidos, en Países Bajos y, cómo no, en la península Ibérica.
Con esta cantidad de ejemplares, ya se enviaron los documentos requeridos por el Ministerio de Agricultura para el reconocimiento oficial de la raza y como dice su presidente “vamos por buen camino, esto lleva mucho trabajo, pues para llegar hasta aquí hemos realizado un esfuerzo inmenso y mucho tiempo, porque llevamos desde 2001 y lo que nos queda todavía. Estamos satisfechos porque vemos que es mayor la demanda de ratoneros palmeros que la oferta”.
No se trata de un perro prolífico, pues “en los partos suelen darse entre dos y cinco cachorros y por eso tenemos una lista de espera importante y cada día me llama gente interesada por esta raza”. La propia asociación lleva los registros de estas camadas, registros que posteriormente son enviados a la RSCE.
De campo
Es un perro que se define como un cazador de ratas, pero también como ayudante del podenco canario en la caza del conejo y, al ser tan activo y pendiente de todo, se usa de alerta de un perro pastor o guardián para que avise de cualquier incidencia. Son perros muy activos y con mucho temperamento.
Por sus características físicas podemos decir que se trata una de las mejores formas para mantener a los roedores a raya, tras las dificultades sanitarias para usar raticidas. Donde mejor se desenvuelve es en el campo, en las fincas, en los sembrados y en almacenes. La mayor parte de los ratoneros son demandados para estas labores o como complemento para otros perros de caza.
Como mascota, para tenerlo encerrado en un piso y salir solo a paseos cortos “no lo recomiendo, porque es un perro que requiere mucha actividad. En principio, yo creo que ningún perro es para piso y estos cuando son cachorros destrozan todo lo que se encuentran, porque no paran, no tienen fin. Como son muy cariñosos quieren estar con el dueño y si este sale se volverá loco, porque son perros exclusivamente de campo, sin duda, porque es el carácter que tiene la raza”, aclara Rodríguez.
En cuanto a coloración del pelo presenta una capa de tres posibles colores: blanco, marrón (canelo) y negro, que pueden darse mezclando uno con el blanco o los tres a la vez. Las orejas deben estar partidas en forma de rosa, nunca con las orejas erectas. La cola, cortita. Actualmente nacen en un 70% con poco tamaño. El resto con cola más larga, aunque la tendencia es que nazcan con cola corta que es lo más significativo de ellos.
La salud
Particularmente, indica el presidente, tiene menos peso que otros ratoneros (el andaluz o el valenciano), son más ligeros, con las patas más cortas y son más rústicos. “Yo soy el que más perros tiene, pues poseo siete hembras, otros en la isla (La Palma) tienen dos o tres, en Tenerife hay varios criadores, en Gran Canaria con un criador y en Fuerteventura otros dos criadores”.
La esperanza de vida está entre 15 y 18 años y no se refleja problemas físicos significativos que le afecten a esta raza de perros pequeños, siempre pendientes de los movimientos de su dueño, al que adoran y siempre que pueden se ponen en su regazo.
Ahora solo falta esperar el reconocimiento oficial, que esperan que no se demore demasiado, para tener respaldo institucional y dar el salto para que sea conocido en otros lugares del planeta.
Los datos
+ 700 ejemplares registrados en la RSCE
15-18 años de esperanza de vida
2-5 cachorros en el parto
(Páginas 16 y 17)
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