Las vibrisas proporcionan información valiosa a los gatos
Gato con botas no caza y sin bigotes tendrá peor sentido de la orientación, de percibir distancias, de localizar objetos en la oscuridad que tienen cerca y no ven, de predecir temblores de tierra o enfermedades en una persona. Además, cuando comen algo exquisito los veremos estremecer. Las vibrisas son pelos largos y especiales que se localizan en el bigote, la frente y algunos en las extremidades anteriores
Por E. MUÑOZ
A diferencia de los humanos, el pelo animal, cada uno de ellos, cumple una función física. Tanto la capa interna, como la externa, los largos pelos de la cola o de la melena y, por supuesto, los bigotes tienen una utilidad importante.
Un humano puede ir afeitado, con bigote, perilla, barba… y su finalidad es totalmente estética. A un gato (o a un perro) cada pelo del bigote le va a proporcionar una información muy necesaria. Por eso nunca, nunca jamás se le deben cortar.
Información
Los pelos de los que hablamos, más escasos, gruesos y largos se sitúan en la parte inferior de la nariz, de ahí su nombre, en similitud con el bigote humano. Pero también están en la frente y algunos en las extremidades delanteras. Son como antenas receptoras que van a captar vibraciones que informan al gato en diversas circunstancias sobre presencia de algún peligro o tal vez de alguna presa, en especial cuando hay oscuridad total o mientras duermen. Estos pelos especiales se llaman vibrisas.
Los gatos gozan de una visión espectacular durante la noche, pero flojean un tanto en las distancias cortas. Ahí es donde entran en funcionamiento las vibrisas, que compensan la falta de visión cercana y a través de sus movimientos son capaces de informar con una imagen en tres dimensiones de lo que tienen delante y no pueden ver.
Otro aspecto importante del que informan los bigotes en la oscuridad es del espacio que tienen delante. Si encuentran un hueco sirven como sensores del tamaño para comprobar si el cuerpo cabe por él. A ambos lados de la cabeza sobresalen esos pelos que miden y valoran si son capaces de poder pasar todo el cuerpo por ese lugar.
A diferencia del resto del pelo del cuerpo, estos bigotes tienen un número concreto: alrededor de dos docenas. Como todos los pelos del cuerpo pueden caerse, pero son reemplazados por otros para seguir cumpliendo su labor informativa.
Pero no solo sirven para recibir información, sino también para comunicarse con otros congéneres o transmitir diferentes emociones. Si nuestro minino está tranquilo sus bigotes estarán relajados, mientras que si los colocan pegados a su cuerpo hacia atrás, pegados a su cara, indicarán miedo, enfado o estado de alerta, así que cuidado con su posible reacción.
No se cortan NUNCA
Como mi gatito no va a salir de casa no necesita estos bigotes. Eso es lo que pueden pensar aquellos dueños cuyas mascotas no salen nunca de casa, pero están en un grave error.
Estos pelos son diferentes al resto del cuerpo y aquellas personas que los consideran feos, proceden a cortarlos sin saber el perjuicio que le están haciendo a su mascota. Sin ellos perderán gran parte de la información necesaria para su vida diaria. Van a limitar su sentido de la orientación, su movilidad en la oscuridad y, cómo no, su capacidad de comunicarse con el entorno.
Les vamos a dificultar su capacidad de medir las distancias en los saltos y movimientos, por lo que podrán chocarse con objetos que antes podían detectar y sortear. Esto puede hacer, además, que los veamos más tristones de lo normal. La ventaja es que volverán a crecerles, aunque tardará un largo tiempo en volver a tener su tamaño habitual.
Ojo, que si vemos que nuestro gato pierde sus bigotes es porque puede tener algún problema de alergia, por lo que sí que es recomendable llevarlo al veterinario por si necesita un tratamiento.
El sexto sentido
Si tu gato tiene acceso al exterior, a jardín o campo y luego vuelve, esos bigotes serán unos informadores perfectos de los cambios meteorológicos, tanto la humedad como la presión atmosférica. Más aún, con sus vibrisas son capaces de captar las vibraciones electromagnéticas, los temblores de tierra o incluso las erupciones volcánicas. Lo de tener siete vidas seguro que también tiene que ver con sus bigotes mágicos…
Es más, al igual que se dice que las mujeres tienen un sexto sentido, los gatos también pueden predecir vibraciones de los organismos enfermos, llegando incluso a predecir la muerte de algún paciente. Además, en el plano más esotérico, se les presume cierta conexión con otras dimensiones, con el más allá, con capacidades de percibir energía de las personas vivas, incluso las muertas.
Finalmente, los bigotes nos dan información cuando comen algo que les producen placer gustativo. Podemos observar cómo se estremecen de gusto. Así que a buscar ese alimento que les hace derretirse de placer y contemplar cómo lo disfrutan.
Ya sabes todo lo que las vibrisas son capaces de informar a tu gato y a ti, así que no cometas la aberración de quitar todo lo positivo que tienen esos pelos de su bigote, su frente o sus patas. Todo son beneficios y no hay ningún inconveniente.
(Páginas 36 y 37)
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