Viajar en avión, misión casi imposible
Miles de mascotas viajan cada año en los casi 50 aeropuertos distribuidos a lo largo del país. No todas las compañías aéreas permiten viajar con perro. Además, cada una establece sus propios requisitos. Por todo esto, hay quienes ponen en entredicho el confort del animal durante el vuelo y optan por otras alternativas como el tren o el autobús, pero eso sí, sólo si su perro pesa menos de 10 kg ya que para los medianos y grandes ni siquiera hay alternativa.
Por Jonathan MANZANO
Cada vez más personas piensan en sus perros a la hora de desplazarse a otros países o territorios ya sea por agua, tierra o aire. De todas estas opciones, la más frecuentada es el avión, posiblemente por la corta duración de los trayectos. Sin embargo, el número de jaulas limitado por avión dificulta encontrar un vuelo disponible con el que poder trasladarnos junto a nuestro perro. Hay compañías aéreas que incluso restringen el número de animales que puede facturar cada viajero como establecen, por ejemplo, Air Europa (5) o Lufthansa (2).
El tamaño del perro determinará donde viaja: en la cabina o en la bodega del avión. Para poder viajar en cabina, el animal y transportador no deben superar los 8 kg de peso, debiendo permanecer durante el vuelo debajo del asiento que se encuentra en frente del guía. Vueling sólo permite viajar en sus aviones a perros de razas pequeñas que no superen los 8 kg, máximo dos por persona. Esta compañía aérea que transporta mascotas desde 2009 ya ha transportado más de 380.000 animales transportados, unos 70.000 en lo que va de año afirman a LADRIDOS.
De superar los 8 kg de peso, el perro se verá obligado a viajar en una jaula o transportín ubicada en la bodega, zona que puede llegar a alcanzar altas temperaturas y ocasionar un gran estrés durante el vuelo al animal.
De hecho, están exentos de viajar en esta área los canes de nariz chata o braquicéfalos como el King Charles Spaniel, Pitbull, San Bernardo, SharPei, Shich-tzu, Yorkshire terrier, entre otras razas, ya que tal y como dictan compañías como Iberia, “corren un mayor riesgo de sufrir golpes de calor y trastornos respiratorios cuando se exponen al estrés o a altas temperaturas”, explican.
El Pitbull Terrier, Dogo Argentino, Akita, Inu, Tosa Inu, Fila Brasileño y American Staffordshire Terrier, los denominados Perros Potencialmente Peligrosos, presentan grandes limitaciones a la hora de desplazarse, llegando a prohibir la entrada a alguna de estas razas en diferentes países europeos. Por ejemplo, el Dogo Argentino, Fila Brasileño, American Pitt Bull y Tosa Inu en Malta.
Para poder viajar en avión, los transportines deberán estar supervisados por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), los cuales intentan garantizar las condiciones de comodidad en la que viajan los canes. A pesar de esto, siguen existiendo numerosos casos en los que los perros viajan en pésimas condiciones.
Iberia, Lufthansa, Iberia Express, Vueling, TAP, Air Europa... son algunas de las conocidas aerolíneas “petfriendly” que permiten volar junto a nuestros compañeros peludos. La compañía aérea, las dimensiones del animal y el destino final determinarán el precio final del trayecto. Entre las aerolíneas más caras destaca TAP, cuyo precio puede oscilar desde los 32 hasta los 480 euros. Tras ella, Lufhtansa (50-300 euros) e Iberia (25-300). En el otro lado de la moneda se encuentra Vueling, cuyo precio máximo para facturar mascotas es de 40 euros para viajes de carácter internacional y 25 para desplazamientos nacionales.
En Iberia y Air Europa, entre otras, los animales que quieran viajar a los Estados Miembro de la Unión Europea deberán ir acompañados de un pasaporte donde figure que han sido correctamente identificados con un microchip y vacunados de la rabia. “Transportamos animales desde 1986. Además, actualmente colaboramos con la asociación Animaerea” afirman desde Air Europa a LADRIDOS. Animaerea es una organización sin ánimo de lucro que está formado por un grupo de voluntarios que se encarga de desplazar perros adoptados o rescatados por particulares así como de enviar animales entre asociaciones.
En Iberia o Air Europa, aquellos que viajen a Irlanda, Malta, Reino Unido y Suecia necesitan haber realizado de manera adicional una valoración de anticuerpos neutralizantes cuya muestra deberá ser tomada desde los 30 días hasta los 120, según el país de destino. En vuelos operados a/desde Reino Unido sólo se permitirá el acceso de animales como mercancía, ya que desde algunas compañías aún no está permitido aún el embarque de animales ni en cabina ni en bodega a dicho destino.
A pesar de los cientos de pasajeros que viajan junto a sus mascotas, existen algunas aerolíneas que aún no permiten el acceso de perros particulares como en Ryanair o easyJet. Sin embargo, sí a los perros guía, de asistencia o de ayuda emocional, animales que viajan gratis en todas las aerolíneas previa certificación de la necesidad del animal para el guía.
Más de 10 kg: ni en tren ni en autobús
Sólo algunos perros pueden viajar en otros medios de transporte como tren o autobús. Además de que únicamente está permitido el acceso de un perro por persona, el animal no puede superar los 10 kg de peso, lo que significa que las razas medianas o grandes vuelven a estar discriminadas. El precio depende del medio de transporte. Por un lado, en ALSA el precio por facturar al animal será del 50 % correspondiente al billete de su guía. Por otro lado, Avanzabus establece unas condiciones más flexibles al permitir viajar de manera gratuita al número de perros que cada pasajero desee llevar. En cualquiera de los casos el animal viajará sólo e incomunicado en el maletero del vehículo durante todo el trayecto. Al igual que sucede con el autobús, únicamente los perros de razas pequeñas con un peso inferior a los 10 kg pueden viajar en tren. Desde 1999 Renfe permite transportar animales en sus trayectos. El año pasado transportó más de 105.000 mascotas, un 14,7% más que en 2015 tal y como informan desde la compañía ferroviaria. Para poder facturar al can se deberá pagar el 25% del importe del billete del propietario. El perro deberá situarse en todo momento en los pies del pasajero. Para poder disfrutar de un asiento donde depositar al can deberá pagarse un billete completo. Podrán viajar gratis los animales de aquellos viajeros de categoría Preferente o similares. Los perros guía o perros de asistencia están exentos de pagar en autobús y en tren, pudiendo viajar al lado del viajero. Estos perros guía son los únicos que tienen permitida la entrada en la mayoría de cruceros de larga distancia.