A muerte con las fuerzas especiales
Feo, del grupo Halcón, tras ocho años contra los narcoterroristas se jubila. Indio ya está preparado para sustituirle. Feo, un malinois de nueve años, es el único perro entrenado como uno más de las Fuerzas Especiales de Argentina que en sus ocho años de servicio ha participado en 24 operaciones con su unidad, el Grupo Halcón, contra el narcoterrorismo. En tres ocasiones ha sido herido de muerte, dos por balazos y uno por apuñalamiento. De las tres ha conseguido recuperarse y sigue a muerte con su guía, el teniente Abel Abeldaño, quien ha indicado a LADRIDOS que ya le está preparando un relevo.
Por Emer IGLESIAS
Abeldaño lleva 18 años en el equipo Halcón y es el dueño de Feo, su entrenador y su guía, todo en uno. Vive con él, y desde hace nueve años no se separan. Las operaciones de las Fuerzas Especiales son peligrosas, sobre todo se enfrentan a narcoterroristas muy violentos que utilizan armas de última generación y no dudan en disparar ráfagas a diestro y siniestro. Por eso Feo ha sido entrenado para ser un perro duro, fuerte y con buena boca.
“Buscamos perros con buena genética, miramos que los padres trabajen bien, es fundamental”, señala Abel. El tipo de entrenamiento de estos canes es similar al de sus compañeros humanos comandos del Grupo Halcón. “Trabajamos bastante la parte táctica con los perros, en equipo, y mucho entrenamiento muy parecido al mondioring, más otro trabajo más duro y específico con disparos, gases, vehículos, armas…”.
La “unidad canina” del Grupo Halcón tiene que desarrollar mucho su olfato, ya que una de sus misiones es la búsqueda de explosivos. Feo en su vida laboral ha encontrado en varias ocasiones artefactos preparados para explotar y provocar una sangrienta matanza.
Los primeros pasos de estos perros, de cachorros, se centran en una estimulación temprana, “los habituamos a todo tipos de ruidos y lugares; luego ya trabajamos en una boca fuerte, ellos muerden con boca completas, nuestro objetivo es endurecer el perro, y trabajar mucho en agua tanto de día como de noche”, añade el guía canino.
Aunque Abel Abeldaño es el guía de Feo y ahora de Indio, para su entrenamiento son un “grupo de personas, algunos son civiles y otros comandos del Grupo Halcón de la Policía, es lo mejor, tener un grupo de personas”.
El nivel de entrenamiento es alto, pero siempre respetando unos límites, “en algunas etapas, como de cachorro sólo se le adiestra una o dos veces por día, en otras ya cuando está más formado, hasta cuatro veces. De adultos el promedio es cinco veces a la semana”.
El tipo de misión que una vez preparados deben realizar hace que sea difícil encontrar un perro que supere bien todas las etapas y llegue a ser operativo. “De cada 10 perros suele quedar solo uno, cuando no pasa una de las etapas ya se detiene su preparación y se dona. Hay perros que no soportan la presión, sobre todo el tema del agua o el trabajo nocturno, otros no meten buena boca, algunos incluso no son sociales y ya no pueden seguir”.
Para estar bien preparado para trabajar con el Grupo de Fuerzas Especiales, el perro tarda de promedio unos 20 meses en su formación. Su guía tiene que ser comando en el Grupo Halcón. Pero no solo a los perros les cuesta llegar al nivel que exigen estas fuerzas policiales. Los guías, cuyo entrenamiento suele durar un año, también son rechazados. “Nos pasa que a veces el perro es superior al guía y entonces ese guía no puede operar con ese perro”.
En la actualidad el Grupo Halcón cuenta con estos dos perros, Feo operativo desde hace ocho años e Indio que se está preparando para coger el relevo en febrero y que lleva una semana ya operativo. “Los compramos en Bélgica y ahora lo que estamos haciendo es sacar crías acá con línea belga. Hemos tenido una camada para sacar más cachorros, miramos de conseguir una perra fuerte para criar. Aquí se congeló semen de Feo, de los cachorros que nacieron hace veinte días me quiero quedar dos para prepararlos, vamos a ver lo que sale”, desvela a LADRIDOS.
Estos policías de raza actúan en la provincia de Buenos Aires fundamentalmente contra el narcoterrorismo y el crimen organizado. Su grupo es uno de los más operativo del país, al año realizan unos 300 servicios de los que Feo ha participado en 24 operaciones reales. “Trabajamos los tres elementos: agua aire y tierra, tienen que operar en cualquier terreno”, añade.
En una de sus actuaciones contra un sicario atrincherado, Feo, a pesar de llevar chaleco antibalas, recibió un disparo que le llevó en estado grave a la UCI veterinaria. Consiguió salir adelante, igual que en otras dos ocasiones que fue herido, una a balazos y otra con un puñal. Tres situaciones que ponen de manifiesto como los perros, al igual que los humanos, se la juegan a muerte en este Grupo Policial.
Indio, una vez que ha finalizado su formación está trabajando junto a Feo desde hace unos días, pero en el Grupo Halcón su objetivo es tener un único perro, sobre todo por falta de tiempo. “Tardamos dos años en preparar un perro y yo además trabajo con el equipo como comando y más de dos perros no tenemos tiempo, sería imposible”.
Feo ya está en sus últimos servicios, en menos de 60 días recibirá una jubilación con todos los honores y seguirá viviendo con su guía “duerme conmigo en mi cama y así seguirá, se merece un buen descanso y comer muy bien, estar tranquilo”