Perros patrulla: la mejor herramienta contra los robos de cobre en las plantas solares
Los cables de cobre de las más de 3.500 plantas solares que existen en nuestro país son un deseo codiciado por ladrones y traficantes por su alto valor de reventa en el mercado negro. Perros de patrulla que acompañan a su guía, vigilante de seguridad, son una buena solución. Cuatro canes y sus guías preparados por Adiestramiento Valencia frenan en seco los robos en una de las mayores plantas solares de Andalucía
Por Emer IGLESIAS
Según los datos del Atlas de las Energías Renovables 2023, realizado por el Observatorio de la Sostenibilidad, en nuestro país hay del orden de 35.351 hectáreas ya dedicadas a energía fotovoltaica (excluidos tejados y superficies artificiales), repartidas en 3.674 municipios. Uno de los principales problemas a los que se enfrentan a diario son los robos.
Por este motivo, los propietarios de una de las mayores plantas solares de nuestro país ubicada en Sevilla se pusieron manos a la obra para frenar los constantes robos que sufrían en sus instalaciones a diario.
Tras pensar en varias posibilidades, se pusieron en contacto con la empresa Adiestramiento Valencia, cuyo responsable, Javier Cano, señala a LADRIDOS que el principal efecto de la presencia de perros en una planta solar es disuasorio. “Son perros patrulla que acompañan a su guía, vigilantes de seguridad que previamente ya trabajan en la plantación. Cuando detectan a alguien manipulando los cables de las instalaciones la primera función que tienen es proteger a su guía”.
Ante el tamaño de esta planta solar y tras analizar la seguridad que era necesaria, se optó por poner a trabajar a cuatro perros, tres pastores alemanes y un malinois, que se turnan para realizar a diario perímetros de seguridad, a veces en coche, a veces andando.
Con experiencia
Estos cuatro perros no partieron de cero, ya que son perros de seguridad formados previamente en Adiestramiento Valencia con experiencia anterior en trabajos similares. “Como nuestro centro está habilitado por el Ministerio del Interior para formación en seguridad privada, lo que hemos hecho es una formación de los vigilantes de seguridad ya titulados para que puedan llevar perro en su trabajo”.
Esta formación consiste en un curso de diez horas obligatorio para ir con el perro. “Nuestros perros ya saben lo que tienen que hacer cuando van de perro patrulla, por lo que nuestro trabajo se ha centrado, tras formar a los guías, evaluarlos y certificar que superan el curso, acoplar a los cuatro perros cada uno con su guía, más o menos ha sido un trabajo de mes y medio, entre el curso, los tres días de acople del guía al perro y al sitio”.
Para ello los responsables del centro de adiestramiento se han desplazado hasta las instalaciones de la planta en Sevilla con sus perros, que han pasado a ser propiedad de la empresa andaluza. Además de acoplar los perros al guía, también tienen que habituarlos a su nuevo sitio de trabajo.
Paneles sandwich
En este caso, como a partir de ahora vivirán en Andalucía en la propia planta solar, lo primero que se ha hecho fue construirles unas viviendas con un fuerte aislamiento para contrarrestar las altas temperaturas de la zona. “Las instalaciones se han construido con paneles sándwich para bajar la temperatura, estos cuatro perros permanecerán allí, no van a casa con sus guías, y el trabajo lo realizan sobre todo por la tarde noche, que son las horas más susceptibles de robos, aunque hacen turnos rotatorios para cubrir las 24 horas”.
El efecto es totalmente disuasorio, de hecho desde que los perros están ya en las instalaciones andaluzas, por el momento no se han producido nuevos actos delictivos”.
Una vez estos cuatro perros están trabajando en la capital andaluza, a partir de ahora su formación se centrará en un reciclaje a cargo de Adiestramiento Valencia cada mes y medio, cuyos responsables se desplazarán a Sevilla.
Los datos
4 perros, tres pastor alemán y uno malinois, son los vigilantes en la planta de Sevilla
3 días son los necesarios para acoplar un perro a su nuevo guía
(Páginas 8 y 9)
Los perros de vigilancia están preparados para disuadir, intimidar e intervenir si fuera necesario